Piscina municipal
En una publicación anterior me comprometí a contar cómo recibimos la piscina y cómo la entregamos; en definitiva todas las carencias que cubrimos y las obras y mejoras que realizamos.
Pues lo cuento ...
Desde el inicio del mandato en 2015 y hasta el momento de la moción de censura el espacio deportivo de la Piscina Municipal fue un motivo de preocupación.
No sólo por poder ofrecer un mejor servicio a los ciudadanos sino por la mala situación que tenían las instalaciones cuando iniciamos el mandato, en junio de 2015.
Tenía graves desperfectos en muchos de sus servicios. La sala de calderas estaba en una situación muy deficiente. La sala de bombas y de cloración estaban unidas y con una corrosión peligrosa. La instalación eléctrica no estaba terminada ni hecha la auditoría obligatoria de los edificios públicos. El sistema contra incendios estaba sin poderse utilizar, sin equipos de detección y con los equipos de extinción sin servicios y oxidados. Las tres calderas estaban en una situación crítica. El edificio no era accesible para personas con discapacidad. El gasto en combustible era muy elevado. Las condiciones para el cumplimiento de las normativas sanitarias no era el correcto. La cubierta de la zona de vestuarios, y de acceso, y la cubierta de la zona del vaso de piscina tenían grandes desperfectos.
Ante tal situación nos pusimos a realizar todas aquellas mejoras necesarias para poder poner en el mejor estado posible la instalación.
Se realizaron obras para conseguir la mejora de las condiciones interiores de la piscina mediante la disposición de una desumectadora eficiente; que mejora las condiciones de humedad y de temperatura del aire y del agua.
Se colocó un ascensor que permita la accesibilidad a toda la instalación.
Se mejoró el sistema contra incendios adaptándolo a toda la normativa de obligado cumplimiento.
Se adaptó toda la instalación eléctrica para que cumpliera con las normas actuales y se pudiera certificar.
Se cambiaron las calderas por unas con un sistema energéticamente más admisible.
Se mejoró la cubierta del vaso de la piscina mediante la aplicación de un sellado de las juntas del sistema de cubierta.
Se pintó toda la edificación tanto por fuera como por dentro.
Se mejoraron los vestuarios con el sellado de las juntas de las duchas.
Se puso en funcionamiento el servicio de mantenimiento de instalaciones térmicas; obligado por el Reglamento de instalaciones térmicas de los edificios.
Se cambió el sistema de control eléctrico de la sala de bombas que se encontraba oxidado por la accion del vapor del cloro.
Se sacó el sistema de cloración de la sala de bombas.
Se contrató el sistema de análisis periódicos del agua, según el Reglamento Autonómico que fija los criterios técnicos-sanitarios de las piscinas, para el control de la Legionella.
Se colocó un Kit sanitario obligatorio.
Se realizaron las auditorías por un Organismo Certificador Autorizado.
Se contrató a un técnico para que certificara las instalaciones que fueron mejoradas; y así disponer de todas las garantías en los servicios que se prestan en la piscina.
El gasto acumulado durante estos dos años de trabajo fue de 430.000€; entre Ayuntamiento e Icodtesa.
Francis González.
